Para los que están aprendiendo español, debe ser curioso verse inmersos en una conversación donde salen a relucir nombres como Fulano/a, Mengano/a o Zutano/a, o los hijos de éstos (Fulanito/a, Menganito/a o Zutanito/a), donde se sabe de sus obras, acciones y milagros pero no quienes son. Igual que cuando se menciona a un tal Pedro Pérez o Juan Pérez, que no se sabe si son distintos o la misma persona, o un tal Perico de los Palotes. Todos ellos viven siempre lejos, en lugar desconocido, en un lugar sin identidades que tal vez se llame Tal o Cual.
Fulanita (de tal) no sabemos si es alta o baja, Menganito (de cual) si es gordo o flaco, o si Juan Pérez está de buen ver. Como los ingleses tampoco lo saben de un (o unos) tal Tom, Dick and Harry. Pero les tratamos a todos con tal naturalidad que un extranjero podría pensar que hablamos sobre amigos o familiares.
Todos estos personajes tan recurrentes en la lengua española se usan para refersirse a personas que no puedes, no quieres o no es importante precisar. Por ejemplo, decimos: Me da igual lo que te haya dicho Fulano o Mengano, la verdad es otra o Le haces más caso a Pepito de los Palotes que a mi. También se emplea a menudo para dar explicaciones sobre como redactar una carta o un documento oficial: Menganita de tal, el 2 octubre de 2012.
En definitiva, uno seres inexistentes que habitan en el mundo de las ideas de la lengua. No te esfuerces en buscarlos, llegarán ellos solitos!
One thought on “Fulanitos y demás seres”
conversación Mexicana: ” Hola, como estas? Bien, y tu? También,bien, bien. Donde vas? Pa’ yá! Ah, q bueno, yo también, vamos juntos, no?” FIN